El mal camino

Muchos seguimos con una mezcla de perplejidad, decepción y frustración la deriva emprendida por Mariano Rajoy en una renovación de todo menos de él mismo dentro del PP.

Y, sinceramente, a mi no me gusta ese «centrismo» que consiste en caer simpáticos a los nacionalistas, por ejemplo. Y parece ser que no soy la única que desconfía de la nueva trayectoria del PP, puesto que un millón de votantes más no volverían a dar su voto a ésta formación según una encuesta del CIS.

El único partido que pierde respaldo en intención de voto, según éste último barómetro, es el PP. El PSOE mantiene el mismo porcentaje de apoyo que cosechó en las generales del 9 de marzo y, tras la caída del PP, se sitúa seis puntos por encima del PP en intención de voto.

La estimación de voto de UPyD duplica el resultado obtenido en las pasadas generales, y mi impresión es que ésos votos recogidos por la formación de Rosa Díez provienen de personas que han retirado su apoyo al PP.

Las encuestas del CIS tienen el problema del tiempo que transcurre desde que son recogidos los datos hasta que se publica el resultado. Quiere ello decir que éstos datos fueron recogidos entre el 24 y el 30 de abril; es decir, que ya se había producido el órdago de Rajoy en Elche (el 19 de abril), cuando invitó a irse a otro partido a los que no se sintieran a gusto en el PP. Pero desde aquel momento, la crisis interna no ha hecho otra cosa que aumentar a pasos agigantados.

Una crisis interna con un Mariano Rajoy que se aferra desesperadamente a la presidencia del partido, del que se marchan dirigentes y militantes destacados como es el caso de María San Gil, líder de los populares vascos o José Antonio Ortega Lara, afiliado y emblema de la lucha antiterrorista. Por otro lado, Regina Otaola, alcaldesa de Lizarza, ha argumentado que Rajoy quiere tirar por tierra los principios con los que el partido acudió a las generales.

Pero lo más decepcionante de todo ello es que Rajoy ha tenido la capacidad suicida de no dejar margen para ningún candidato que no sea él mismo. Hasta la noble intención de Juan Costa de dar un paso al frente, no encuentra los apoyos que se le suponían; porque Mariano ha estado cosechando antes del próximo congreso; todos los avales provincia a provincia con un empeño digno de mejor causa, de manera que dispone de casi 2.100 de los 3.000 compromisarios (sólo necesitaba 600). Pero, para no dar una imagen tan unánime, que recuerda demasiado a las acusaciones de «congreso a la búlgara»; los barones le han aconsejado «ceder» parte de esos avales a otra candidatura alternativa.

Sinceramente, creo que no es problema de avales, sino de candidato. No existe, no hay, y nadie en el partido es capaz de dar la cara. Rajoy, en su empeño por mantenerse a toda costa en la poltrona, ha anulado a las demás personas que sonaban o podían sonar como alternativa.

Espero que a alguien en el PP se le enciendan las luces de alarma ante éstos datos que significan para mí dos cosas claras: que el electorado del PP ha castigado el cambio de rumbo que ha impuesto Rajoy; y que el PP necesita una primarias porque, de otra manera, se quedará sin candidato cuando la muerte política de Rajoy (más pronto que tarde), tenga lugar. En otras palabras, Rajoy tiene que irse para que el PP pueda vivir.

Soraya ayer se creció

Tengo que decir que la actual deriva del PP hacia posiciones más centradas, en cuanto significa renuncia a unos principios que, al menos yo, consideraba fundamentales; me crea una enorme desazón. Tampoco me gustan los nuevos capitanes que comandan la nave del PP hacia no se sabe dónde.

Pero, a pesar de todo ello, tengo que reconocer que ayer Soraya estuvo muy bien, genial diría yo. Con ese hablar cansino, casi aburrido, que tiene; hizo gala de una ironía capaz de sacar de sus casillas a una Fernández de la Vega con experiencia parlamentaria sobradamente aquilatada.

La sesión de control ayer en el Parlamento tuvo una dificultad añadida para la vicepresidenta de parte de la novicia de Rajoy. Ayer por lo pronto, estuvo incluso más brillante que la vice, y le ha quitado a ésta todo el protagonismo en los medios que hoy comentan la sesión de control. La portavoz del PP le preguntó sobre las medidas para reforzar la solidaridad autonómica. Y De la Vega le ha recordado que el modelo vigente, de la época del PP, es «bilateral, insolidario y opaco». Y entonces, una irónica Sáez de Santamaría le replicó: «Triunfa la técnica Bermejo: echar la culpa del atasco de la Justicia a Franco, de la financiación autonómica al PP y de la inmigración a Colón».

Ingeniosa y ocurrente. Pero aún más, cuando, sacando totalmente de sus casillas a la vicepresidenta, siempre reclamando un progreso en la laicidad del Estado; ésta ha llegado a invocar a Dios en el hemiciclo: «Que ustedes me hablen de bilateralidad… ¡pero que baje Dios y lo vea señoría» exclamó Fernández de la Vega. No es necesario decir el regocijo que toda la bancada del PP manifestó ante semejante exclamación. Las carcajadas fueron sonoras y el aplauso a Soraya, general.

Y como llevo tiempo echando en falta un ejercicio de oposición mínimo en el PP, me alegro de que por fin se haya empezado en ello. Sigo expectante ante el partido que ha de surgir en el próximo congreso; pero al menos alguien cumple la función de oposición.

Algunos memes: el cotilla y el de las seis cosas

Y como siempre que me pierdo, a la vuelta, tengo que poner el trabajo al día. Pero realmente es un trabajo que me gusta, y más porque significa que os acordáis de mí. Y, para la vuelta al trabajo, nada mejor que contestar a los memes que tengo atrasados. Y son los siguientes:

Arcendo me envía éste curioso meme (el de las seis cosas que me importan y las seis que me gustan), pero he tenido suerte; porque en el que me envía Elentir (el meme cotilla) están incluídas parcialmente algunas preguntas del meme de Arcendo, asi que contestaré a los dos a la vez 😉 , espero que mostréis indulgencia conmigo por ello.

Meme cotilla

Un color: siempre el azul: azul cielo, azul pitufo, el azul del mar, el azul de las aguamarinas, el azul bebé, el azul que han de llevar las novias sin que se vea, incluso el Blue Screen of Death o BSoD…

Un número: el nueve.

Un libro: toda la serie de Dune, en especial: «Casa Capitular: Dune».

Una canción: Moon Flower de Carlos Santana. Uf, qué recuerdos…

Una comida: sopa criolla de quinua.

Un postre: helado, de cualquier sabor y a ser posible en mucha cantidad 😳 .

Un lugar: cerca del cielo, el Kang Rinponche (Joya preciosa de las Nieves) es decir, el Monte Kailash. A nivel del mar, la Bahía de Halong.

Una película: El Padrino o Ciudadano Kane. No sabría elegir entre las dos.

4 x 7: el ciclo de la vida (y no lo digo por El Rey León )

Un momento del día: esos cinco minutos desde que suena el despertador hasta que me levanto.

Un momento de la noche: cuando noto que me empiezo a dormir.

¿Blog, foro o chat?: El blog, sin duda. El foro aún, pero el chat nada. Y lo sabéis bien 😉

¿Te has sentido alguna vez acosado virtualmente?: Si, pero siempre he ignorado a los acosadores.

3 x 8: Los tibetanos que llevaron al Everest la llama olímpica.

Un referente en tu vida: mi padre.

Un referente histórico: Viktor Frankl. Necesito leer su libro El hombre en busca de sentido de vez en cuando para darme cuenta real y verdadera de lo afortunada que soy.

De ficción: el Cayo Mario de Colleen Mccullough.

¿Un café?: el que todas las mañanas me deja hecho mi esposo.

Proyectos inmediatos: Terminar varias cositas que estoy haciendo a una chiquitina preciosa 😉

¿Eres feliz?: Casi siempre.

¿Te atreves a decir tu edad?: No, porque no me gusta dejarla escrita en el blog para que puedan verla hasta en Madagascar…

6 cosas que sí y 6 que no me gustan

6 cosas que me gustan:

1.- Ver baloncesto, ir con los amigos al Palacio de Deportes los domingos y vibrar con mi equipo. También me gusta mucho la NBA y siempre que puedo trasnocho para ver los partidos, sobre todo los playoffs, las WCF Finals.

2.- El chocolate. No me importa que engorde. Como decía mi abuela, al fin y al cabo, me queda una eternidad para «estar en los huesos».

3.- Leer, sobre todo en la cama. Creo que no sería capaz de dormir sin leer alguna página.

4.- Charlar con los amigos, saber que confían en mí, que me llamen para contarme sus cosas, o para no contarme nada, para vernos porque sí.

5.- La política y la economía; quizá porque nunca me he dedicado a ellas. Pero me gusta leer, entender y saber qué ocurre a mi alrededor sobre esos temas.

6.- Viajar, no importa el sitio o la época. Y siempre en compañía de los que quiero.

6 cosas que no me gustan:

1.- Los tipos pesimistas que nunca encuentran motivo para ser agradecidos por el don más grande que tienen: la vida.

2.- Tener que esperar mucho tiempo en una tienda o institución oficial para que me atiendan; y que, cuando me toque, suene el teléfono y la señorita que te está «atendiendo» considere que el teléfono tiene preferencia sobre ti, que llevas hora y cuarto esperando.

3.- El reggaeton que llevan muchos niñatos carentes de cualquier tipo de gusto a todo trapo en su coche. Al fin y al cabo, las desgracias de cada uno no hay porqué hacerlas públicas ni gritarlas de forma tan escandalosa.

4.- Las flores de plástico. Y comprendo que las hay bonitas, pero no sé, no las soporto. Y menos en los cementerios. Son como manifestaciones de una fantasía irreal de algo bellísimo y por lo tanto; debe ser, tiene que ser, efímero.

5.- No me gustan los nacionalismos ni las vacuas argumentaciones de los nacionalistas. La mayoría de las veces muestran un «sentimiento irracional» al margen de cualquier justificación histórica o real.

6.- El cine y los libros «de miedo»; me parecen más que nada, «de casquería» y muestran un extraordinario mal gusto en mi opinión.

Y, finalmente, para completar el meme que Arcendo tuvo a bien enviarme, sólo me quedaría contestar a las seis cosas que me importan; y que pongo a continuación.

6 cosas que me importan.

1.- MI familia, todos y cada uno de ellos son importantísimos para mi. Y también me importan las cosas que a ellos les importan 😉

2.- Mis amigos. Son insustituibles y necesarios cada uno en particular por una serie de razones especiales y personalísimas. Les quiero como son y me importan todas sus cosas.

3.- Viajar, me importa mucho mantener la curiosidad por ver y conocer sitios, culturas y pueblos diferentes. Y, en el fondo, seguir comprobando que nos parecemos muchísimo más de lo que suponemos.

4.- Me importa seguir luchando en favor de la vida; porque me importa la vida. Desde su concepción hasta el momento en que termina.

5.- Crecer, en todos los sentidos: en conocimiento, espiritualmente; y, sobre todo, en mi Fe.

6.- La salud, quizá hasta hace algunos días no hubiera incluido ésta entre las cosas que me importan, pero hoy, realmente me importa mucho, para poder vivir dignamente y dar lo mejor hasta que Dios decida.

Aqui sigo…

Y efectivamente, aquí sigo, aunque un poco perdida. Circunstancias personales no me han permitido estar éstos días; y quiero pediros a todos los que me leéis una oración por una personita muy cercana y querida que ha tenido mucha prisa por empezar a vivir y nos ha tenido en vilo. Y, aunque ya estamos mucho más tranquilos; y prueba de ello es que empiezo a escribir de nuevo, no sé de cuánto tiempo dispondré. (También podéis darme la enhorabuena 😉 )

A todos los amigos que os habéis acordado de mi estos días de ausencia, premiándome y enviando memes; os responderé, aunque ya sabéis que tardaré porque no me sobra tiempo. Pero ni mucho menos dejaré de hacerlo. Al contrario, quiero daros las gracias, de corazón, por vuestro recuerdo.

Prometo cinco minutines al día para poner alguna reflexión de actualidad. Y es, más que nada, para desahogarme visto lo visto en el panorama político nacional. Con un gobierno socialista aún más reafirmado en sus posturas antiliberales y anticristianas; y con una oposición enrocada en reafirmar un liderazgo, ya perdido, de Rajoy; y que no es útil porque no hace aquello para lo que ha sido elegida.

Dudo mucho que el próximo congreso del PP de junio ayude a nada, puesto que se parte de una falacia: no puede renovar nada, señor Rajoy, si usted no es el primero en renovarse. Y además, en cierta medida, me siento traicionada por su «renovación», yo voté a un PP que se presentaba como liberal y defendía el humanismo cristiano entre otras cosas básicas. Y me encuentro que ahora todo eso que yo creí votar se presenta al congreso en «enmiendas», y no en ponencias. Lamento que mi voto haya sido para ésto y, sinceramente; me siento engañada y estafada.

A los asesinos y sus cómplices

María la Brava, María San Gil, puso antesdeayer encima de la mesa el porqué no se puede ser «blanditos» con los nacionalistas. Y, como para darle la razón, los asesinos de la ETA, criados a los pechos y al calor de los nacionalistas del PNV, han acudido a darle la razón. A demostrar una vez más que no se puede estar cerca de los que amparan, protegen y sostienen a los asesinos. Y yo voy más allá, ni siquiera se puede estar cerca de otros nacionalismos que ven con simpatía o con cierta comprensión éstas actividades. Y aún más, no se puede permitir la negociación política, como hizo el PSOE, con asesinos. Si ahora el PP se acerca a los nacionalismos, a esta infecta política de concesiones, no seré yo la que vaya en ese barco. Creo que no hace falta un burdo remedo del PSOE.

Y es que ésta pasada noche ha vuelto a ocurrir. Y ocurre por dejación. No puedo entender, y cada día me cuesta más, que todas las armas del estado no sirvan para acabar de una vez con esa mafia terrorista. No podemos dejarnos a tantas personas inocentes por el camino. No es justo, no es honesto, ni para con ellos ni para con sus familias. Y porque yo soy uno de ellos. El que Juan Manuel Piñuel Villalón fuera conocido de una persona muy cercana no significa nada más que hubiéramos podido ser cualquiera de nosotros. Y yo no me resigno, aunque lo verdaderamente dramático es que la sociedad española ya se ha resignado: no pide responsabilidades a los que dan alas, o negocian políticamente con los asesinos. El PSOE ha vuelto a ganar, volverá a negociar y el PNV seguirá ejerciendo de encubridor de asesinos.

Porque en Legutiano (Vitoria), esta noche pasada, ETA ha colocado un coche bomba en la puerta del cuartel de la Guardia Civil. Y ha matado a Juan Manuel, padre de una pequeña a la que nadie dará explicaciones de porqué ZP ordenó negociar con esa gentuza, o ni siquiera recibirá una muestra de cariño de parte de ese neandertal que dice llamarse Ibarretxe, y que ha convocado un referéndum con el que vuelve a dar alas a los asesinos amparando sus reivindicaciones políticas; a pesar de que no han dejado de matar y de extorsionar.

Lo siento, pero la rabia de la sinrazón y de la inmoralidad más absoluta no me dejan pensar más que en lo fácil que sería eliminar uno a uno a esos animales asesinos con las armas del estado. Si el estado tuviera la real intención de hacerlo. Porque ya sabemos que se puede, ya se hizo. Se eliminaron las fuentes de financiación, los santuarios protectores… y ETA quedó contra las cuerdas.

Mi más sentido pésame a la familia de Juan Manuel. Y descanse en paz. Mis condolencias también a la Guardia Civil y a España entera, porque salvo estos desalmados, lo sentimos todos.

¿Dónde crees que vas?

Hace algún tiempo que me cuesta hablar de política. Y me cuesta porque me produce desazón, pena y; las más de las veces, desánimo y apatía el ver la deriva que va tomando el partido al que voté en las pasadas elecciones generales.

El problema de confiar en una institución para depositar tu voto es que éste es cautivo de ésa institución durante cuatro años. Si fuera de otra manera, yo reclamaría mi voto, el de las pasadas elecciones, al Partido Popular. Yo voté al PP, entre otras razones, porque creí que tenía una política clara frente a la disgregación territorial que los nacionalismos propugnan y porque su posición frente al terrorismo de ETA es la que considero mejor y más ajustada a los principios de derrota de la banda terrorista con las armas del Estado.

Esos motivos que fueron los que decantaron mi voto hacia el PP, cada día que nos acerca al congreso de junio, los encuentro más difuminados, más diluidos en un batiburrillo de posiciones que ellos denominan «centradas» y a mi me parecen cobardes. María San Gil, María la Brava, como la llaman no se ha dejado llevar al huerto de quien gobierna en Canarias en coalición con nacionalistas; y no admitió las componendas inadmisibles con partidos que, en el País Vasco, han amargado la vida a los militantes del PP y han compadreado con quienes han dado alas, dinero y proyección a los etarras.

Y es que María lo único que ha hecho ha sido anteponer sus principios a las componendas políticas, por eso es tan querida, tan «brava». ¿Qué ha hecho Rajoy? ¿Cuales son los principios de Rajoy? Yo aseguro que los desconozco. Y, para avalar que a Rajoy y a su «equipo fantasma», los principios le importan lo que a mi las melenas de mi vecino; esta mañana leo que la dirección del PP rectifica y asume las ideas de San Gil.

Ya está bien. Señor Rajoy, no se puede iniciar una renovación de todos menos de usted mismo. Su «centrismo» me suena a cobardía, a miedo a decir lo que muchos de sus votantes no nos avergonzamos de decir. Y, como liberal, me encuentro en la difícil tesitura de decidir a quién votaré en las próximas elecciones; porque usted me pone muy difícil el volver a hacerlo. Y es que se ha abocado usted mismo a un error irreversible con esa renovación que no había madurado suficientemente. Usted no es más que un «primus inter pares», y se ha creído un faraón de pacotilla.

Nadie dirige la nave a la deriva que es ahora mismo el PP; y su transformación en un partido diferente, desarbolando convicciones y principios, lo único que conduce es al desastre. Y hacia él va Rajoy a toda vela.

Y gracias porque, aún estando desaparecida, no dejáis de acordaros de mi

• Gracias a Martha Colmenares, recibo la Bendición de San MIguel Arcángel. «San Miguel es uno de los siete arcángeles y está entre los tres cuyos nombres aparecen en la Biblia. Los otros dos son Gabriel y Rafael. La Santa Iglesia da a San Miguel el más alto lugar entre los arcángeles y le llama «Príncipe de los espíritus celestiales», «jefe o cabeza de la milicia celestial». Desde el Antiguo Testamento aparece como el gran defensor del pueblo de Dios contra el demonio y su poderosa defensa continúa en el Nuevo Testamento».

Tendría ahora que pasar a elegir doce bitácoras más para dedicarles la bendición, pero como hace tanto tiempo que me fue concedido, lo que haré será dedicarlo simplemente a todos mis enlaces porque todos ellos son ángeles en la tierra para mi.

• Y también, gracias a Arcendo, recibo el premio «La Anaconda Cachonda», que es un premio que se da, a aquellos que pintan con colores, una vida que se nos ofrece en blanco y negro. Y el único requisito es entregarlo a su vez a otras seis bitácoras que reúnan esa premisa inicial.

Yo, como he tardado tanto en hacerme eco de la recepción de éste premio, lo otorgaré igualmente a todos mis enlaces, pues en cada una de sus bitácoras encuentro los colores que necesito para hacer cada día un poco menos negro.

Los «deberes» se me acumulan…

No imaginaba yo que estar desaparecida por diferentes motivos (unos justificables y otros menos), iba a conllevar un montón de trabajo a mi vuelta. Pero eso si, la cantidad de deberes que tengo pendientes hace que me ponga con más ganas y ahínco a intentar ponerme al día.

El meme más antiguo que tengo pendiente se lo debo a Arcendo y también a persio; y, a pesar de que soy enormemente reacia a comentar nada personal, quizá por pudor; como es todo un detalle el que se acordaran ambos de mi, no tengo más remedio que sentirme agradecida por ello; y, por supuesto, contestarlo.

Las reglas del meme son las siguientes:

1.-Poner el enlace de la persona que somos elegidos.

2.-Poner las reglas en el blog.

3.-Compartir seis (6) cosas no importantes y seis (6) que nos gusten.

4.-Elegir seis (6) personas al final.

5.-Avisar a estas personas y dejar un comentario en sus blogs.

Entre las seis cosas «que me dejan helada», pero que me dejan helada porque para mí tienen determinados grados de importancia, se me ocurren las siguientes:

– La ropa para perros. Lo siento, nunca lo he soportado, me parece un atentado a la dignidad del animal. Sé que lo que voy a decir quizá no es correcto, pero ¿no os parece infinitamente más digno un toro luchando por su vida en la plaza que un yorkshire vestido con una faldita de cuadros escoceses? Cuando hablan del maltrato animal siempre pienso en ésto, no lo puedo evitar.

– El mal humor y el estar continuamente enfadados o el pesimismo como actitud vital. Hay personas que viven continuamente amargadas, que no transmiten ninguna alegría. Es cierto que todos estamos algún día enfadados o tristes; pero ser incapaces de ver la cantidad de cosas maravillosas que puedes vivir a diario y dar gracias por ellas, es de un egoísmo y de una soberbia que no soporto.

– No soporto a esos niñatos indeseables que se repantigan en los asientos del autobús o del metro, con los auriculares puestos y que observan con indiferencia como algún anciano va de pie haciendo verdaderos esfuerzos por no caer cuando el autobús llega a cada parada o da un frenazo. Eso sí, la solidaridad es una de las principales inquietudes que dicen tener los jóvenes…

– Me molesta de manera especial la gente que conduce por las autovías haciendo lo que yo llamo «efecto muelle». De un carril a otro sin parar en cuanto ven un sitio y a toda velocidad, únicamente para llegar tres segundos antes que tu. Y para lograr ese importantísimo récord molestan a todos los conductores pacíficos que vamos por nuestro carril.

– La política, cuando se transforma en una excesiva y absurda regulación social, alimentada por la pasividad de la oposición cuando no ejerce ningún control sobre el gobierno. Como ejemplo sirvan las leyes sobre matrimonio homosexual, sobre educación para introducir el adoctrinamiento de la EpC, o la reforma anunciada de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa.

– Aborrezco de manera especial, y creo que es la única cosa que odio a conciencia; a las personas que se erigen en jueces de la vida de los seres más inválidos y desprotegidos, de las personas más desamparadas. Nadie tiene el derecho, absolutamente nadie, amparándose en una ley, a decidir sobre la vida de los no nacidos. Y no me vale el que me digan que hay leyes que los justifican. También en el legítimo III Reich se promulgaron leyes contra los judíos y que los ciudadanos alemanes consideraban justas. ¿Eso hace a una ley justa? ¿Eso hace inocentes a las personas que se amparan en leyes injustas? No, y nunca podré entenderlo de otra manera.

Y las seis cosas «que me reverdecen», algo mucho más sencillo de pensar, las primeras que se me ocurren son:

– Acurrucarme en la cama cuando hace mucho frío, sentir el tacto de las sábanas recién puestas y, mientras oigo, por ejemplo, la sonata en Do Mayor K6; imaginar, recordando su casa en Salzburgo qué pensaría Mozart, cómo imaginaría su música, cómo la soñaría o la escucharía mientras la componía para sí mismo; y asi, quedarme dormida.

– Un buen partido de baloncesto. Por ejemplo, el último de la liga regular del CeBé Granada frente al TAU en que nos jugábamos la permanencia en la liga ACB. Adrenalina a raudales y alegría inmensa por la permanencia conseguida. Y esta misma noche pasada, ver junto a un amigo el partidazo de play-offs de la NBA entre los Lakers y Utah. Ver a Kobe Bryant es algo que hace vibrar a los que amamos éste deporte.

– Viajar, conocer sitios y personas; maneras de vivir y de entender el mundo. Nunca me canso de comprobar las distintas interpretaciones que el ser humano es capaz de dar a las mismas cosas. Y, por supuesto, de ver lo que a lo largo de la historia ha sido capaz de hacer, desde las Pirámides con sus 5.000 años de antigüedad hasta la reciente Ópera de Sydney, pasando por el Machu Picchu o Angkor-Watt, o el Taj Mahal…

– Me gusta hablar con mis amigos, reír con ellos, entristecerme con ellos; sentir que puedo, aunque sea sólo un poquito, hacerles olvidar sus penas y disgustos (soy muy mala contando chistes y ésto es un arma infalible para hacerles reir). Me gusta que se sientan felices o un poco menos apenados cuando estan conmigo, y les añoro cuando recuerdo su complicidad y los sentimientos que vivimos cuando nos tomamos un café, o un helado, o una Coca-Cola en mutua compañía.

– Me encanta leer, y me encanta comprar libros. Prefiero el ensayo y también una buena novela dependiendo del estado de ánimo. Entre los ensayos que me gusta releer una y otra vez están «El gen egoísta» y «El relojero ciego» de Richard Dawkins sobre la teoría evolutiva. En cuanto a la única novela que he releído dos veces, además del Quijote, es «La tabla de Flandes» de Pérez Reverte; sé que no es una obra maestra, pero… a mi me entretuvo mucho. Y pasarme la tardes rebuscando entre las estanterías de la librería, leyendo las contraportadas e imaginando cómo será cada libro que cojo es algo que me resulta delicioso.

– Y, finalmente, me gusta escribir en esta bitácora con una taza de café delante. Me gusta levantarme temprano y empezar el día leyendo las noticias de actualidad; y tomar el café que cada día hace mi esposo y me deja preparado por si me levanto más tarde que él y ya se ha marchado. Me encanta ese café de cada día por lo mucho que significa después de tantos años. Creo que, realmente, ese café con el que escribo ésto ahora mismo es un arma letal porque no he podido nunca evitar la ternura que me produce encontrarlo; y eso ha acabado con todos mis enfados conyugales.

Ahora teóricamente tendría que pasar el meme a seis amigos blogueros para que lo contestaran; pero dado que he sido tan lenta en hacerlo, lo dejo para que el que quiera lo conteste. Y espero que no os hayan aburrido estos datos más personales sobre mi.

Una más de la niña de Rajoy

No sé si el anuncio de que Soraya Sáenz de Santamaría podría sancionar a Luisa Fernanda Rudi por no votar a favor del trasvase a Barcelona tiene visos de hacerse realidad o no. En cualquier caso, si ésto llega a hacerse, anunció que no votaré nunca más a éste Partido Popular.

Rudí, una mujer que fue presidenta del Congreso, miembro de un partido en aquel gobierno, el del PP, que trabajó duro para conseguir un gran consenso que acabó en un Plan Hidrológico Nacional que luego el PSOE tiró a la papelera porque sí, porque le daba votos en Aragón y en Cataluña; sin tener en cuenta que era un proyecto que beneficiaba a toda España, incluidos Aragón y Cataluña.

Que el PSOE lo hiciera porque nunca ha creído en España, y porque nunca ha tenido otra prioridad que no fuera conseguir votos para ganar elecciones; entra en lo poco que personalmente esperaba de un partido como este. Y no menos esperaba de un individuo como el presidente de la Comunidad Autónoma de Aragón, Marcelino Iglesias, que ha ejercido siempre de mamporrero de los nacionalistas catalanes.

Pero, sinceramente que el PP de Soraya vaya a sancionar a Rudi por reclamar algo tan evidente y obvio como que el agua del Ebro debe ser para TODOS los españoles que la necesitan, y no sólo para los catalanes, me produce una honda rabia. Porque, desde mi punto de vista todo el PP debió decir NO al trasvase del Ebro a Barcelona y SI al Plan Hidrológico Nacional.

Espero que la chica de Valladolid abandone ya la chulería que la ha acompañado desde su nombramiento, y no sancione a quien tiene más valor que ella, más redaños y más experiencia que ella. Alguien debería decirle a ésta nena que le queda mucho para llegar a la altura de la Rudí, y eso si lo consigue. Alguien, en definitiva, de quien tendría Soraya mucho que aprender. Y es que me da pena comentar ésto, pero lo que veo es que el PP se ha deshecho de Zaplana, ha condenado al anonimato a Pizarro, a Esperanza Aguirre se le dan bofetadas sin mano cada vez que se puede. Y mientras, los socialistas hacen y deshacen a su antojo; porque no tienen oposición. Porque la oposición que ha diseñado Rajoy está más preocupada de asegurarse la poltrona y eliminar las voces disonantes que de hacer su cometido.

Por cierto, una reflexión ¿dónde están los varones y barones del PP?, porque, hasta la presente, sólo le plantan cara a la niña de Rajoy las mujeres, como la Rudí o Ana Tormé.